Si sufres aflicciones materiales, has de saber que las dificultades purifican, lo que es más valioso que el bienestar terrenal. Si son fracasos espirituales, medita sobre ellos en tiempos asignados para desarrollar un corazón contrito.
Si sufres aflicciones materiales, has de saber que las dificultades purifican, lo que es más valioso que el bienestar terrenal. Si son fracasos espirituales, medita sobre ellos en tiempos asignados para desarrollar un corazón contrito.